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sábado, 7 de septiembre de 2013

ANÁLISIS - SPLINTER CELL BLACKLIST


Sam Fisher vuelve a la carga con Splinter Cell Blacklist. Tras los hechos ocurridos en Conviction, la Third Echelon dirigida por Reed se desmorona, y la actual presidenta de los Estados Unidos continúa en su cargo.
Pero todo está a punto de cambiar tras un ataque a gran escala contra una base aérea americana, donde se encuentra Sam Fisher, Victor Coste y otras caras conocidas.
LOS INGENIEROS, un extraño nombre para un grupo terrorista, anunció una lista de ataques, con fecha y hora y un nombre en clave. ¿La forma de pararlos? Que Estados Unidos termine con su imperialismo militarista, y ellos y todos sus aliados retiren sus bases en el extranjero.
Obviamente, se niegan. Dada la gravedad de la situación, se crea una fuerza especial: Fourth Echelon, cuyo cuarter general es de lo más especial, pues se encuentra en un gran avión de carga, el Paladín, para evitar posibles ataques enemigos.
Y aquí empieza Splinter Cell Blacklist.


Sam Fisher nació en 1957. Siendo los hechos de SCB en el 2013, significa que tiene 56 años. ¿Para cuándo la jubilación?
Probablemente, la gran novedad del juego sea la libertad y no linealidad que ofrece. En lugar de tener las misiones principales seguidas, como venía ocurriendo hasta ahora, podemos hacerlas cuando queramos, alternándolas con misiones secundarias que nos darán nuestros compañeros de Fourth Echelon. Estas secundarias pueden ser realizadas por Sam Fisher, o en cooperativo, de forma realista a la historia, siendo el segundo jugador un nuevo personaje que aparece como compañero de Sam: un agente de la CIA llamado Briggs.
Antes de seguir hablando de las misiones, cabe destacar otra gran cualidad de Blacklist. En el anterior juego, Conviction, fue criticado por los seguidores clásicos de la saga por alejarse de la jugabilidad de los anteriores juegos, donde el sigilo era fundamental, y la dificultad, bastante elevada. Pues bien, en Blacklist, todo eso vuelve. La dificultad, repartida por 4 niveles, ofrece al jugador un buen reto en los niveles más altos (el más difícil no permite utilizar ciertas características del juego).
En Blacklist, lo bueno es que los jugadores eligen cómo jugar, repartiendo las bajas enemigas en 3 niveles:


  • Sigilo no letal (Phantom) noqueamos a los enemigos, sin que nos detecten.
  • Sigilo letal (Phanter) eliminamos a los enemigos sigilosamente, sin que nos detecten.
  • Asalto (Assault) nos detectan, hacemos ruido...


  • Es interesante el modo Phantom, el cual consiste en realizar Noqueos. La forma más común es cuerpo a cuerpo, sin utilizar cuchillos. En Conviction, esto no era posible, pues las eliminaciones cuerpo a cuerpo solían terminar en una ejecución con la pistola (de forma visual no era así con las armas secundarias, y algunas misiones con el modo cooperativo requerían noquear). En Blacklist, abriendo el menú radial de armas y dispositivos, podemos escoger el modo Letal o no Letal, el cual se diferencia en noquear o eliminar a los enemigos, en nuestros ataques cuerpo a cuerpo.

    Por otra parte, muchos dispositivos basados en ataques eléctricos permiten noquear a los enemigos: pistolas eléctricas, ballestas con virotes eléctricos, minas electrostáticas... Todo ello con su consiguiente realismo e interacción con el juego, como si otras armas fueran: si disparamos un dardo electrostático al agua, todos los enemigos que estén pisando ese agua serán noqueados; además, podemos realizar ejecuciones ''marcar y ejecutar'' (nos permite marcar varios enemigos y abatirlos a todos automáticamente) con la pistola eléctrica. Por supuesto, completar misiones sin matar a nadie aumentará nuestra puntuación y beneficios; de hecho un objetivo secundario de las misiones consiste en ello.

    El realismo del juego hace nota en que algunas veces los enemigos pueden reanimar a sus aliados noqueados, los cuales continuarán su búsqueda aturdidos, de una forma muy realista.


    Hay varios tipos de enemigos: los más normales, francotiradores, soldados de élite como Sam Fisher y compañía, hasta enemigos normales con casco y Titanes, pasando por perros y unos tipos muy molestos que lanzan decenas de interminables minitanques de juguete que explotan (los perros y los minitanques, lo más molesto que verás). Todos los que llevan casco, estos dos últimos, no se matarán de un disparo en la cabeza, si se les da en el casco, pues se les quitará. Para ello, el juego cooperativo permite que un jugador le quite el casco y otro lo abata. Otras formas de eliminarlos, es con ataques cuerpo a cuerpo, pero los Titanes (tienen cascos más fuertes que necesitan más disparos para ser quitados, así como un fuerte blindaje corporal) deben de ser tratados con cautela, pues sólo se les podrá eliminar cuerpo a cuerpo (en el juego llamado Mano a Mano) desde una altura o desde atrás. Cuidado, pisar cristales, madera o ir demasiado deprisa llamará la atención de cualquier enemigo.

    Los normales tienen a su vez varios grupos, pues algunos son flojos y permiten eliminaciones mano a mano, frente a frente, y otros opondrán resistencia (totalmente, he llegado a estar peleándome con uno durante un minuto seguido porque me había quedado sin munición en el cargador.) En cualquier caso, es perfecto.
    El jugador elige cómo jugar (exceptuando ciertas misiones que requieren sigilo). Aquí entra en escena la Personalización del personaje, sus accesorios, sus armas, sus dispositivos, sus pertrechos...
    Cada parte del traje de Splinter Cell de Sam Fisher (y Briggs) puede ser seleccionable, y personalizable:trajes, pantalones, guantes, botas... cada grupo tiene un tipo de vestimenta especializada para el sigilo o el asalto.
    El arsenal de armas, al igual que en Conviction, es otro aspecto donde los jugadores pueden tomar parte en un gran abanico de posibilidades. Cada arma tiene sus accesorios, que pueden ser comprado y añadidos . Es mucho mejor que en Conviction, donde sólo podíamos comprar 3 accesorios, que además no se podían quitar posteriormente. Además, hay un arsenal enorme.     


    Movimientos rápidos y precisos galardonan a Blacklist con una buena nota en cuanto a jugabilidad.
    Podemos resumir Blacklist como el Splinter Cell más completo de todos: nos permite jugar como queramos (nosqueo sigiloso, eliminación sigilosa o asalto pesado), la jugabilidad es buena y muy completa, así como las misiones principales y secundarias, estas últimas optimizadas por el modo cooperativo épico y táctico.
    En definitiva, Blacklist es un gran juego, que a pesar de sus Bugs, puede fácilmente coronarse como uno de estos juegos todoterreno, y un Splinter Cell muy completo, además de un gran juego cooperativo, (con un total de 17 misiones, que quien sabe, igual se amplían con DLCs).
    Una visualización óptima se logrará en PC, con una buena tarjeta gráfica, mientras las versiones de consola, por desgracia, tienen una calidad pobre.
    Gracias a todos por visitar el blog, comentad y compartirlo. Hasta la próxima.

    2 comentarios:

    1. Pero, para hacer un análisis,¿No debes haber jugado al juego primero? Que yo sepa solo las grandes compañias tienen potencial para conseguir jugar a juegos recientemente estrenados...

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    2. En efecto, no lo he jugado, he publicado el análisis a base de llenarme la cabeza de información, características, artículos oficiales de otras páginas, he leído tanto, y he visto tanto, que he creído poder hacer un pequeño análisis. Este artículo no es ni la cuarta parte de los que podrás encontrar en internet publicados por gente (poca probablemente), yo sólo he escrito lo que sé del juego, mucho o poco. Y si crees que sólo las compañías tienen potencial para conseguir juegos recien estrenados no conoces el mundo de internet.

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